Respuesta:
Un monitor ultrawide ofrece un mayor campo visual en algunos juegos, así como una mayor superficie de escritorio que lo hace más adecuado para la multitarea. El inconveniente es que la alta resolución requiere una GPU suficientemente potente.
Además, los monitores widescreen normales ofrecen algunas características que merecen más la pena y que pueden suponer una mejor relación calidad-precio.
¿Qué tamaño es demasiado grande cuando se trata de monitores?
Bueno, el consenso común es que 27 pulgadas es el tamaño ideal de monitores cuando se trata para el uso de escritorio, con algo más grande simplemente seria demasiado incómodo para mirar de cerca.
Sin embargo, eso excluye un aspecto muy importante de una pantalla: la relación de aspecto (sin juego de palabras).
En efecto, utilizar una pantalla normal 16:9 de 34 pulgadas en el escritorio no es precisamente cómodo, pero ¿Qué ocurre cuando hablamos de una pantalla de 21:9 y 34 pulgadas?
Pues que se adaptan mucho mejor al trabajo de escritorio, eso sí.
Aun así, cada tipo de producto tiene sus ventajas e inconvenientes, así que eso es precisamente lo que vamos a ver en esta guía: los pros y los contras de los monitores ultrawide y si merecen la pena para gaming y el uso diario.
Ventajas de un Monitor UltraWide
La principal y más notable ventaja de un monitor ultrawide es el aumento del campo de visión (FOV) en ciertos juegos. Un campo de visión más amplio significa una mejor visión periférica, algo que sin duda puede ofrecer una ventaja, especialmente en los juegos multijugador competitivos.
En cuanto al uso diario, la anchura extra ofrece bastante espacio adicional en la pantalla, lo que significa que la multitarea será una tarea más fácil, especialmente si te gusta tener varias ventanas abiertas a la vez.
Esto puede aplicarse tanto al trabajo como a la navegación diaria por la web.
Desventajas de un Monitor UltraWide
Cuando se trata de juegos, hay dos problemas que puedes encontrar con un monitor ultrawide.
En primer lugar, no todos los juegos admiten una relación de aspecto de 21:9. En ese caso, la imagen podría estirarse para llenar toda la pantalla, o los bordes simplemente quedarían sin usar. Aunque este suele ser el caso de los títulos más antiguos, algunos juegos más recientes, como Overwatch, deshabilitan deliberadamente la compatibilidad con 21:9 para evitar dar una ventaja injusta a algunos jugadores.
En segundo lugar, un monitor más grande y ancho también implica una mayor resolución de pantalla. Esto podría afectar negativamente al rendimiento del juego, especialmente si utilizas una GPU más débil. Por lo tanto, asegúrate de que tu GPU puede soportar completamente un monitor ultrawide antes de adquirirlo.
Si hablamos de aplicaciones no relacionadas con los juegos, realmente no hay grandes desventajas con las que haya que lidiar cuando se utiliza el monitor para las tareas cotidianas o el trabajo.
Sin embargo, los monitores Ultrawide son más caros debido a su tamaño adicional. Por eso, si quieres adquirir uno para aplicaciones no relacionadas con el juego, asegúrate de que las ventajas que ofrece merezcan realmente la pena.
Conclusión – ¿Vale la Pena un Monitor Ultrawide?
Dicho todo esto, ¿Cómo responderíamos a la pregunta principal?
Bueno, realmente no hay una respuesta singular. Es simplemente muy subjetivo.
¿Quieres el FOV adicional y/o el espacio extra en la pantalla? Si es así, seguro que un monitor ultrawide merece la pena. Sin embargo, si tienes un presupuesto limitado, adquirir un monitor ultrawide significará renunciar a otras características que podrías obtener en un monitor 16:9 normal del mismo rango de precios, como una mayor tasa de refresco.
Además, nos gustaría añadir que los monitores ultrawide funcionan mejor si vienen con una pantalla curva, ya que puede añadir un grado extra de inmersión a la experiencia de juego.
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